Con el final de año prácticamente ya a la vuelta de la esquina, comenzamos a pensar en aquellos propósitos de año nuevo que hemos cumplido y alcanzado con éxito; pero, por norma general, hacemos mayor hincapié algo pesarosos en aquellos que no hemos podido llegar a cumplir por diversos motivos.
Un viaje fuera de España, realizar algo de ejercicio, ahorrar… suelen estar en el top 3 de propósitos no cumplidos al finalizar el año. Otros de los propósitos estrella que solemos marcarnos cuando comenzamos el año es comprar una casa o reformar nuestra vivienda habitual.
Pues bien, presta atención, que si éstos, especialmente el propósito de reformar tu casa, se encontraba entre tus propósitos de 2021, aún estás a tiempo de llevarlo a cabo y empezar 2022 con esta meta cumplida.
En el post de la semana pasada, ya os dejamos una serie de trucos en los que incluíamos alguna que otra pequeña reforma para conseguir más luz natural en vuestra vivienda ahora que los días son más grises: Combate los días grises ganando luz natural en casa, sobre todo teniendo en cuenta que Ávila es una de las ciudades con más días de sol al año. En el post de esta semana, desde Inmhogar Ávila, os traemos las bases a seguir para tomar la decisión correcta a la hora de elegir la calefacción de tu vivienda.
Toma nota, que antes de que acabe el año, siguiente estos sencillos consejos, podrás cumplir tu propósito y reformar tu vivienda.
En verdad, se trata del mejor momento para llevar a cabo pequeñas reformas interiores en el hogar; como aquel que dice, “año nuevo, vida nueva” y, siendo así, nunca mejor dicho. Un cambio de imagen para dar la bienvenida al 2022 con buenas vibras y positividad.
El tema de la calefacción a la hora de decidir el sistema adecuado para una vivienda, siempre suele dar algún que otro quebradero de cabeza, ya que, tomar la decisión equivocada, suele derivar en dos cosas; por un lado, no conseguir el clima agradable y deseado que buscábamos en la vivienda y, por consiguiente, gastar más de lo esperado, en especial en esos meses más fríos del año, hay que tener en cuenta que Ávila marca muchos días la temperatura más baja del País.
Lo primero que debemos hacer, es pararnos a pensar en lo siguiente; la forma en la que queremos que llegue el calor. Pero, para reducir el amplio abanico de posibilidades, esta vez nos centraremos en dos sistemas de calefacción en concreto, por norma general, los más elegidos por la mayoría de los hogares, el suelo radiante y los radiadores.
Ambos sistemas presentan distintas ventajas y desventajas a la hora de elegirlos como calefacción para nuestro hogar, como, por ejemplo, que el suelo radiante es invisible; es decir, al ir la calefacción por debajo del suelo, no habrá ningún aparato a la vista o en la pared que, estéticamente, modifique la imagen de las estancias. Sin embargo, los radiadores a pesar de quedar a la vista, climatizan las estancias rápidamente y, si, a veces son un estorbo a la hora de distribuir y colocar los muebles así como para la imagen de la estancia, pero eso con pequeños y sencillos trucos puede llegar a disimularse e, incluso, conseguir una estética de lo más moderna adaptada al estilo de cada entorno.
Para decantarte finalmente por una u otra opción de los dos sistemas de calefacción que estamos contemplando, antes de nada, deberás tener en cuenta una serie de factores para poder hacerlo; como, por ejemplo, el clima de la zona en la que se encuentra la vivienda, la superficie, el aislamiento… es decir, pensarlo con la “cabeza fría” y barajar cuál de estas posibilidades se adapta mejor a la vivienda que vamos a reformar antes de decidirte por una de las dos.
El aislamiento de una vivienda es fundamental para que entre el menor frío posible, así como para que no se escape el calor del interior de la casa y ya se trate de suelo radiante o de radiadores pueda ser eficaz.
Antes de precipitarnos con alguna opción como bien decíamos anteriormente, vayamos con otro factor que será decisivo en ésta; el generador térmico. Éste podrá ser de alta temperatura, siendo en este caso nuestra mejor elección el sistema de radiadores, o de baja temperatura, que entonces nos interesaría más instalar en nuestra vivienda el suelo radiante.
Lo mismo ocurre con la fuente de energía; el gas, por ejemplo, sería apto para ambos sistemas de calefacción, pero en el caso de la biomasa o la aerotermia funcionan de manera más eficaz con el suelo radiante.
Antes, hemos comentado ligeramente el factor del clima; y, en efecto, también se trata de un determinante a la hora de decidir el tipo de calefacción para una casa. Zonas con un clima frío estable y constante, como nuestra ciudad son las más adecuadas para el sistema de calefacción de suelo radiante, ya que, al tener inercia térmica, el calor se sigue emitiendo durante varias horas después de apagarse, lo que nos proporciona una sensación de calor constante y agradable. Sin embargo, en climas templados o con temperaturas inestables a lo largo del día, los radiadores te proporcionarán el clima y temperatura ambiente deseado gracias a su carácter puntual y específico.
Ahora bien, algo que también debes tener en cuenta, es el grado de ocupación de la vivienda; es decir, las horas y el tiempo que pasáis dentro de casa. Si estás todo el día fuera de casa y durante la mayoría de horas al cabo del día no hay nadie en la vivienda, el suelo radiante no te interesa demasiado, ya que consumirá energía constantemente cada vez que se encienda sin que haya nadie en casa. En este tipo de situaciones te interesa más el sistema de calefacción por radiadores, ya que, como acabamos de comentar, su funcionamiento es más puntual, de tal manera que calientan rápidamente cuando lo necesites sin necesidad de tenerlos encendidos todo el día si estás fuera.
Como habrás podido comprobar, analizar todos los detalles antes de tomar una decisión de este calibre, es fundamental, ya que te proporcionará tu objetivo principal; el clima en nuestro hogar perfecto que estamos buscando, así como un ahorro para el bolsillo.